lunes, 13 de agosto de 2012

Ir al cine ¿placer o tortura?

Las cosas cambian con el tiempo, eso es inevitable, se tienen que adaptar y evolucionar para poder sobrevivir, siempre hay cambios y uno de los más afectados es el cine.

Ahora los precios de los cines, aun los considero adecuados, que van en convencional (2D) a unos $50.00 pesos y en 3D a $70.00, si están algo elevados, pero, al menos yo, decía antes vale la pena.

En lo que mi memoria no me falla antes del 2006 acudía al cine aproximadamente una vez al mes, después en el 2007 acudía entre una a tres veces por semana hasta el 2009, y me tocó ver un cambio radical no solo en el tipo de proyección, sino en la decadencia de los asistentes.

En el 2007 e inicios de 2008, puedo decir que los asistentes a las funciones respetaban a los demás, mejor dicho, respetaban el lugar, el cine.

Considero, por lo que he vivido, que pasó un caso inverso a lo que la mayoría de la gente considera, que acuden menos personas al cine, pero no, en el 2006, 2007 e incluso a inicios de 2008, las salas no se llenaban en funciones y días fuertes, claro solo en los mega blockbusters, pero en su mayoría no.

El primer factor que cambio, para mi fue las promociones, ahora hasta por comprar una libreta hay cupones, a demás los cines tienen su venta de cuponeras, los calendarios, sus días martes al 2X1 y los miércoles de descuento, 3D a precio de convencional con la tarjeta, si bien esto es cuestión de gusto para los cinéfilos, por una parte si y por otra diría que NO.

Pero, por qué no, ahora asisten más personas que no van en realidad a disfrutar la película, sino a pasar el rato, ya no hay respeto, a lo que voy, personas y no sólo adolescentes que son a los que siempre se les culpa, pero yo nunca me comporte y ni me comporto  así (ni la mayoría de mis conocidos ni "amigos" cosa que en los próximos días hablaré), hablando por el celular, por el maldito radio, o con sus mismos acompañantes, personas que creen que están viendo una película interactiva, o aquellos que se anticipan y sacan conclusiones de lo que va a pasar en pantalla, todos hacemos esto, pero no lo gritamos.

Los cines ya no parecen cines, antes la dulcería era otra cosas, los precios siempre han sido y serán altos, pero ahora parecen bares, si hasta cervezas ya nos venden (antes solo en los complejos VIP), que si la pizza, el café, la fruta picada, que la botana, sólo les falta el cazo de las garnachas.

Otra moda, se supone que por regularización, sólo las películas que han sido aprobadas por la RTC con la clasificación A y AA serán dobladas porque van enfocadas al público infantil, pero en especial este 2012, nos han traído cintas (por costumbre, si antes era el celuloide, ahora son digital) dobladas y ni siquiera nos dan la opción de elegir a nosotros, sino que todas las funciones son así, si el formato les permite configurar el idioma, antes era en las mañanas y tardes en español y las noches su idioma original, la última película que tenia funciones nocturnas en idioma original y subtítulos fue Gahoole en el 2010 y eso que era para niños.

Este año podemos poner de ejemplos de cintas dobladas en cines que no van dirigidas a los chiquillos: Ese es mi hijo, robo en las alturas, terror en lo profundo 3D, Underworld el despertar 3D, furia de titanes 2, american pie el reencuentro, batleship, y recientemente Total recall: el vengador del futuro, al cine al que acudo llegaron dos copias y las dos dobladas, si tenía ganas de verla, ni modo sera en blu ray.

La compañía con la que asistía cambió, si es verdad, antes tenía amigos del bachillerato y por la cuestión del horario coincidíamos la mayoría para poder ir al cine, pero teníamos algo en común, cada uno elegía una película por día, eramos unos 10, pero no se nos dificultava ya que generalmente se estrenan de 2 a 5 películas cada semana, pero acudíamos con el afán de disfrutar la función, posteriormente acudir a comer y comentar lo que habíamos visto en pantalla.

Ahora ya no puedo coincidir con ellos y tengo nuevos y muy pocos de los anteriores, por la cuestión de tiempos con la escuela es casi imposible ponernos de acuerdo, y ni se diga de elegir la película, a veces es preferible ir sólo si en realidad quieres ver una buena película (según nuestro criterio), ya que no coincidimos en gustos, a los que les gusta lo más independiente, que porque esta doblada, que no porque no esta doblada (en serio, tengo conocidos que no les importa que la película sea sueca, japonesa o inglesa, ellos la quieren ver en español) a los que los sólo blockbuster hollywoodenses son buenas películas.

Como se pudieron dar cuenta, antes acudir al cine, en mi caso, era una experiencia placentera, donde la atmósfera era perfecta, totalmente silenciosa, oscura, si no había sonido en pantalla se podía escuchar el ruido del proyector funcionando, ahora es raro que no te pateen el asiento, que suban los pies a las butacas, los celulares sonando y los dueños contestando, los ultra sociales que mandan mensajes y actualizan sus perfiles en redes sociales durante la proyección (si tan sociales son, que se esperen unos meses, se compren la película en blu-ray y que interactúen el el blu-live, o que inviten a verla a sus "amigos" y no nos jodan la película a los demás) y lo peor es que si es en 3D, con la luz de la pantalla del celular te iluminan las gafas y no puedes ver nada...y ni se diga de los que contestan por radio...y los que comen nachos y demás productos escandalosos y olorosos.

A los que nos gusta disfrutar una buena película tenemos pocas opciones, elegir una función en horas muertas, donde casi no acudan personas, evitar los días de las promociones y descuentos o simplemente esperar a que salga en blu-ray y poder verla en nuestra casita con la atmósfera, el sonido, la compañía y el audio perfecto.

Simplemente, cuando acudamos al cine evitar caer en las situaciones que tanto nos molestan, tratar de hablar con nuestros conocidos y decirles que respeten el lugar comportandose, rescatemos los días de cine.


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